
El casco histórico de Utrera continúa viendo cómo se ponen en marcha nuevos proyectos constructivos para lograr revitalizar la zona antigua de la ciudad. Con tal motivo, en el pleno municipal se ha dado cuenta del aumento de edificabilidad en una casa de la calle Eduardo Dato para poder construir siete nuevas viviendas en dicho recinto.
La delegación provincial de Ordenación del Territorio y Patrimonio Histórico ha respaldado esta iniciativa en el número 6 de dicha vía. Ahora el proyecto deberá pasar de nuevo por la comisión local de Patrimonio Histórico para obtener su visto bueno.
El concejal de Urbanismo, Manuel Romero, ha explicado que «se trata de otro proyecto más de regeneración urbana en el casco histórico de Utrera, nuevas oportunidades de vivienda en el centro que se suman a otras iniciativas anunciadas en estos últimos tiempos, como pueden ser las catorce viviendas de la calle Catalina de Perea, las seis de la calle Partera o las cinco de la calle Clemente de la Cuadra».
El edil ha querido recordar que, «aunque este proyecto corresponde a la iniciativa privada, hay que destacar que es posible gracias a la implicación del gobierno de Villalobos, que ya en 2018 modificó el plan especial del conjunto histórico, que rige para este tipo de actuaciones, para permitir que en las edificaciones con menor grado de protección (D) que tengan corrales traseros no protegidos se pueda aumentar la edificabilidad para construir». De esta forma «favorecemos la regeneración del casco histórico, facilitando a la iniciativa privada que se construya dentro de parámetros sostenibles con valor añadido para la ciudad. Por tanto, donde antes existían espacios infrautilizados sin posibilidad de aprovechamiento ahora se puede construir».
La edificación original de la calle Eduardo Dato, fechada en 1935, posee interés constructivo, siendo una finca catalogada con el grado D, por lo que queda protegida la primera crujía. De los siete apartamentos, las dos primeros estarán ubicados en las zonas reformadas del edificio, mientras que los cinco restantes se ubicarán en los antiguos corrales traseros. Por último, se integrarán paneles fotovoltaicos y de agua caliente sanitaria con la intención de hacer una edificación inteligente, con fuentes renovables y protegiendo el medio ambiente.
El alcalde de Utrera, José María Villalobos, ha explicado que «en 2015 heredamos una normativa local urbanística que impedía la regeneración del casco histórico. Una situación muy difícil de revertir pero que, poco a poco, estamos consiguiendo cambiar mediante modificaciones puntuales».
«Entendemos que la normativa en el centro de las ciudades debe tener un carácter protector, pero Utrera tiene un casco histórico muy grande en el que cada vez abundaban más las casas viejas y vacías, precisamente por la normativa urbanística que no favorecía el desarrollo de promociones de viviendas en el centro de nuestra ciudad», ha señalado el regidor local. A pesar de ello, «estamos consiguiendo revertir esta situación para que en los próximos años tengamos un casco histórico más vivo y poblado».