
Las obras de transformación del estadio municipal ‘San Juan Bosco’ afrontan su recta final, con la última parte del proyecto impulsado por el Ayuntamiento de Utrera. Tanto es así que quedan pocas semanas para que vuelva a entrar en funcionamiento.
En este sentido, el alcalde, José María Villalobos, prevé que la culminación de los trabajos previstos en dichas instalaciones se produzca en «la primera quincena de octubre». Según ha señalado, «están rematándose pequeños detalles, y la actuación más importante que queda pendiente es la renovación del césped artificial».
En relación al proyecto de cambio del césped, Villalobos ha recordado que el proceso de licitación se encuentra abierto hasta el día 12 para que las empresas interesadas presenten sus ofertas. Cuenta con un presupuesto base de 235.000 euros, para renovar el terreno de juego.
Sobre el resultado de las actuaciones que ya se han acometido, el regidor local ha afirmado que «está quedando un estadio magnífico, y cuando los utreranos accedan a su interior van a sorprenderse. Ya desde fuera se ve que el cambio ha sido a mejor». José María Villalobos ha señalado que el proyecto de transformación del estadio municipal se enmarca en una renovación de infraestructuras en la zona de Consolación, como es el paseo, el recinto ferial y la construcción del nuevo colegio, haciendo que «el estadio quede acorde con la estética renovada de ese entorno».
El proyecto de reforma integral del estadio permitirá ofrecer una imagen moderna y mejorar la mayoría de sus instalaciones. El estadio pasará de 800 a 2.000 espectadores sentados, al contemplar la reparación, renovación y ampliación del graderío, incluyendo su cubierta. Además, contará con cuatro vestuarios más, una nueva sala de prensa, aulas de formación y oficinas, así como zonas adaptadas destinadas a personas con movilidad reducida.
La modernidad de ser un campo a la última en detalles tecnológicos está en la nueva iluminación y en la instalación de un videomarcador. Por otro lado, el cambio planteado en el estadio municipal también se deja notar de forma destacada en el exterior, ya que la fachada ha sido igualmente remodelada por completo, y en ella se integra un sistema de iluminación que teñirá el edificio con el color que se desee en cada ocasión, permitiendo cambiar la estética de todo el recinto, con distintas posibilidades de iluminación nocturna.
Otra de las cuestiones que contempla el proyecto es la redistribución de los espacios, con nuevas zonas de servicio, como un ambigú, una tienda y una terraza-bar sobre las gradas, con vistas al terreno de juego.