Un hombre ha sido condenado a un año de cárcel por intentar robar, por el método del tirón, una mochila a una mujer que esperaba en una parada de autobús en Utrera. Sin embargo, los magistrados consideran que no ha quedado probado que también intentara secuestrar a esta persona, por lo que se ha librado de otros dos años y medio de prisión. Esa es la resolución de la Audiencia de Sevilla, que ha fallado en contra del argumento de la Fiscalía, cuando esta aseguró que el condenado intentó meter a la víctima en su coche, a la fuerza.
Según recoge Diario de Sevilla, los hechos se registraron sobre las 19.00 horas del pasado 27 de enero. El condenado, Francisco José P. M., de 51 años, pasó una primera vez lentamente mirando a la mujer, para después volver a acercarse, paró su vehículo, se reclinó sobre el asiento del copiloto, abrió la puerta y agarró a la mujer por el brazo, tratando de atraerla para introducirla en el vehículo y quitarle la mochila que llevaba. Sin embargo, la sentencia señala que el hombre no consiguió su propósito porque la víctima le golpeó en la cara con el móvil que llevaba en la mano, logrando así zafarse y salir huyendo del lugar, mientras Francisco José le gritaba a sus espaldas: «hija de puta, te vas a cagar».
El tironero fue detenido gracias a la persistencia de la Guardia Civil. Primero la testigo le reconoció en una composición fotográfica que le mostraron, pero la foto estaba desfasada. Por ello dos semanas después la mujer acudió, acompañada por la Benemérita, a un centro de salud frecuentado por personas en tratamiento con metadona y volvió a reconocer «espontáneamente y sin ningún género de dudas» al acusado, que llegó al lugar conduciendo una motocicleta. Fue entonces detenido allí mismo. Al día siguiente, la mujer lo reconoció nuevamente y sin ninguna duda en una rueda practicada en sede judicial y finalmente lo identificó en el juicio, «comprobando el tribunal su reacción temerosa cuando vio al acusado a través de la mampara colocada para que declarara con la necesaria tranquilidad de ánimo», explican los magistrados de la Sección Cuarta.
La sentencia considera que el tironero no intentó un secuestro, sino un robo. Se sustentan en la declaración de la víctima y en que «la práctica totalidad de las innumerables condenas que le constan a Francisco José son por delitos de robo, careciendo de antecedentes por detención ilegal o por delitos sexuales», que son las motivaciones más habituales para la privación de libertad de la víctima.
Por su parte, el acusado se limitó a asegurar en el juicio que no cometió el delito y que no tiene coche. No obstante, la sentencia argumenta que eso no impide que el día del robo «tuviera uno a su disposición prestado por un amigo o familiar».
A pesar de que la pena ha quedado reducida a un año, la situación del condenado se ha complicado debido a sus antecedentes. Y es que tiene uno de seis meses de cárcel por robo, cuyo ingreso en prisión estaba condicionado a que no cometiese delitos. Por ese motivo ahora se informará al juzgado penal que le condenó.
En octubre de 2019 había sido condenado por dos delitos contra la seguridad vial a la pena de privación del derecho a conducir vehículos a motor durante un año. Por ello, la sentencia acuerda remitir testimonio al juzgado de instrucción para que investigue al ladrón por un nuevo delito continuado contra la seguridad vial, dado que cometió el tirón usando un coche y acudió a recoger su dosis de metadona conduciendo una moto.
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