
Aunque los aficionados al fútbol nunca lo van a olvidar, en las últimas semanas –a causa de la nueva victoria del Sevilla F.C. en la Europa League- la figura del desaparecido futbolista utrerano José Antonio Reyes está más viva que nunca ya que, en un momento tan señalado, han sido los componentes de la plantilla los que han querido homenajear al inolvidable deportista utrerano. Un momento también en el que un reportaje realizado por el periodista de ABC de Sevilla, Roberto Arrocha, ha desvelado un museo muy especial dedicado al astro utrerano que ha cobrado vida en los últimos meses.
Francisco, el padre de José Antonio Reyes, ha llevado cabo la bonita y al mismo tiempo dolorosa tarea de recopilar todo tipo de recuerdos para exponerlos en una habitación de su domicilio. Fotografías de partidos importantes, recortes de periódicos, camisetas, botas, balones y todo tipo de recuerdos que ponen de manifiesto la maestría del utrerano dan vida a este particular museo en el que, como explica Roberto Arrocha, se entra «con la extraña y agradable sensación de que Reyes no se ha ido. Se habla en presente. La habitación es un carrusel de emociones».
Un museo en el que se puede rastrear aquel momento de 2003 en el que José Antonio Reyes se marchó a Londres para formar parte de la plantilla del Arsenal, encontrando una foto firmada por grandes figuras del conjunto inglés como Pires, Fábregas o Bergkamp. También hay recuerdos vinculados a su vuelta, como aquel partido inolvidable en el que el Sevilla venció al Betis 5-1.
Como no podía ser de otra manera, mención aparte merecen los recuerdos vinculados a las tres Europa League que Reyes consiguió levantar vistiendo la camiseta del Sevilla F.C., especialmente la disputada en Basilea contra el Liverpool, en la que, luciendo el bracelete de capitán, fue el encargado de levantar la inolvidable copa.
Piezas muy valiosas que sirven para entender una trayectoria única como la que protagonizó Reyes, entre las que se puede admirar, por ejemplo, la ropa de entrenamiento de todos los equipos en los que militó, decenas de pares de botas y el balón con el que se jugó la final de la Europa League ante el Dnipro, firmado por toda la plantilla sevillista.
«Con la compañía de su padre, entre el dolor y el orgullo, y mientras explica cada detalle, el tiempo se para en el museo. Nadie se nos va jamás si en nuestros recuerdos queda. José Antonio Reyes, siempre con nosotros», explica Roberto Arrocha, quien ha tenido la oportunidad de visitar este emotivo museo con la compañía de Francisco, el padre del futbolista.