
El desvío del arroyo Calzas Anchas ha sido noticia en varias ocasiones debido a los desprendimientos que se han producido de varias piezas de hormigón que forman parte del canal. Para poner fin a este problema, ya están desarrollándose los trabajos necesarios de rehabilitación que permitirán intervenir en diversos puntos de la infraestructura.
El proyecto ha sido promovido por la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir (CHG), que ha adjudicado la actuación por un presupuesto de 1,8 millones de euros. Con un plazo de ejecución de un año, permitirá arreglar los desperfectos que se han producido en los últimos años y reforzar toda la infraestructura.
El citado organismo, dependiente del ministerio para la Transición Ecológica, reconoce que en febrero de 2014 se produjo el desplome de unos 30 metros del canal, que ya fue arreglado. Mientras, en 2018, el derrumbe fue de otros 25 metros, además de registrarse la inclinación del canal en 15 metros a cada lado de la sección desplomada, todo ello a unos 200 metros del camino de la puerta verde de Utrera, en la trasera de la guardería La Fuente. A ello se une un tercer desprendimiento de otros 70 metros en la misma zona. Además, los técnicos han comprobado la existencia de una intensa corrosión de las armaduras de los muros que conforman el canal.
Así las cosas, la Confederación considera «bastante probable» que se haya producido una debilitación estructural generalizada, debido a la corrosión de las armaduras. Eso habría provocado el desplome de los muros, poniendo en peligro el funcionamiento y la explotación del canal.
Para acometer el arreglo del tramo afectado, los expertos han estudiado varias posibilidades, considerando finalmente que la mejor opción es la colocación de nuevas piezas en forma de U. En este sentido, se plantea la demolición de ambos muros en la zona en la que se han producido los derrumbes para colocar las citadas piezas en U prefabricada de hormigón.
Además de esa actuación sobre la sección caída, el proyecto de la CHG contempla intervenir también en varios tramos del canal en los que se ha comprobado que existe un estado de oxidación de las armaduras, donde se trabajará para mitigar los efectos de la corrosión. De igual modo, cada 2,50 metros se están arriostrando los muros en su parte superior con vigas prefabricadas que permitan soportar posibles empujes de tierra.
La obra de desvío del arroyo fue inaugurada oficialmente en junio de 2012. Se trata del proyecto de mayor envergadura de la historia reciente de Utrera, con 12 millones de euros de presupuesto y tres años de trabajos. A esta intervención le sucedió otra intervención complementaria, de ampliación de dicho desvío, que vino a culminar el nuevo trazado del Calzas Anchas con una inversión añadida de 1,54 millones de euros.