La parroquia de Santa María reorganiza los cultos en honor a la Virgen de la Mesa tras suspender la procesión del 15 de agosto

La parroquia de Santa María reorganiza los cultos en honor a la Virgen de la Mesa tras suspender la procesión del 15 de agosto

La pandemia de coronavirus lleva, desde el pasado mes de marzo, tumbando cualquier acto en el que se reúna un número considerable de personas, con la intención de evitar que la enfermedad siga extendiéndose. Ejemplo de ello es la tradicional procesión que cada 15 de agosto protagoniza la Virgen de la Mesa.

Coincidiendo con el día de la Asunción, cientos de personas abarrotan el porche de Santa María para participar en dicho acto religioso, algo que evidentemente este verano se hace imposible. Con tal motivo, la parroquia de Santa María de la Mesa ha tenido que reorganizar los cultos en honor a su titular, para adaptarse a estas circunstancias excepcionales.

Así, el día 15, la eucaristía que se celebra cada año antes de la procesión pasará a desarrollarse en esta ocasión a las 9.00 horas. Es en ese instante cuando la Virgen sale del templo tradicionalmente, coincidiendo con la «hora tercia», por lo que la misa vendrá a sustituir la procesión.

En concreto, con el inicio de la eucaristía, se vivirá de manera simbólica uno de los ritos más asentados en la historia religiosa de Utrera. A esa hora, cuando la Virgen de la Mesa abandona cada año su iglesia, la tradición marca que se le han de pedir tres deseos, de los que el acervo popular cuenta que concede al menos uno. Para que ese rito no se pierda este 15 de agosto, se repetirá la escena aunque con la imagen presidiendo el altar de la parroquia. Allí se procederá a ese instante de oración ante Ella, para que posteriormente continúe la misa.

Al término de esta celebración, las puertas de la iglesia se mantendrán abiertas para que los fieles puedan acudir a saludar a la Virgen en el día de su festividad. Estarán hasta mediodía, cuando la conmemoración de esta jornada culminará con el rezo del ángelus.

Ese día será el colofón a los cultos planteados en su honor. Antes de ello, la comunidad parroquial de Santa María celebrará un triduo, desde el día 12. Las misas darán comienzo a las 21.00 horas, siendo presididas por el párroco y el vicario parroquial.

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