
Como cada primer viernes del mes de marzo, la imagen del Redentor Cautivo debía estar expuesta en besapié, dentro de los cultos anuales en honor. Sin embargo, en esta ocasión ha hermandad del Silencio ha decidido prescindir de dicho acto como prevención por el coronavirus, siendo la primera vez que en Utrera se toma esta determinación.
La corporación ha explicado que, «una vez consultadas las fuentes sanitarias autorizadas, y siguiendo sus recomendaciones», ha acordado suspender el besapié «como medida de prevención ante la situación de alerta sanitaria generada por el coronavirus». No obstante, la imagen permanece expuesta para su veneración durante toda la jornada, por lo que la hermandad anima a que se sustituya el beso «por una reverencia y una oración».
Desde la entidad radicada en la parroquia de Santiago el Mayor «sentimos profundamente las molestias que esta decisión puede causar, pero somos conscientes de que en las circunstancias actuales debe prevalecer la prudencia y sensatez con el fin de evitar riesgos para salud de los ciudadanos». En cualquier caso, «no queremos que esta medida contribuya a generar alarma social, pero las medidas de limpieza e higiene son las más importantes para controlar la transmisión».
Cambios en la distribución de la comunión en misa
La medida de la hermandad del Silencio no es la única al respecto que se toma en el seno de la parroquia de Santiago el Mayor. El párroco del templo, Juan Luis Rubio, ha recomendado a los feligreses en las últimas fechas que, cuando acudan a comulgar en las eucaristías, eviten recibir la sagrada forma en la boca. En su lugar, propone que los fieles pongan sus manos cuando se acerquen al presbítero, para minimizar los riesgos.