
Juntos por Utrera (JxU) ha reclamado al gobierno local que no se cobre una tasa de 30 euros por lo que se ha venido en denominar el «contravado». Lo ha hecho presentando una serie de alegaciones a la ordenanza reguladora de licencias de vados permanentes tras la reciente aprobación provisional por parte del pleno del Ayuntamiento.
En la ordenanza promovida por el gobierno del PSOE se define el «contravado» como la reserva de espacios en las vías y zonas de aceras frente a los vados correctamente señalizados, donde se prohíbe el estacionamiento de vehículos cuando la calle no tenga dimensión suficiente para que la maniobra de acceso y salida pueda realizarse. En este sentido, desde JxU recuerdan que «no se puede conceder un vado permanente en una calle en la que no se puedan realizar las maniobras pertinentes para acceder a una cochera». Por otro lado, el reglamento general de circulación «deja bastante claro en su artículo 91.2.c que no se puede estacionar en ningún lugar donde se obstaculice la entrada o salida de vehículos, por lo que estamos ante un derecho que adquiere automáticamente un ciudadano que obtenga una concesión de vado permanente».
Así las cosas, la persona que paga su plaza de vado permanente «ya debe tener garantizada por sí misma la reserva en el acerado de enfrente en caso de ser necesario para poder entrar o salir de su garaje». Por este motivo, «querer cobrarle 30 euros por ello es inventarse una medida recaudatoria y pretender que la gente pague dos veces por lo mismo», ha afirmado el portavoz de Juntos por Utrera, Francisco Jiménez.
Otra de las propuestas socialistas es permitir a los titulares de vado permanente que puedan aparcar delante del mismo si previamente se pagan otros 30 euros, que les permitiría obtener la tarjeta de reserva de espacio de uso privativo del dominio público para aparcamiento. «No podemos olvidar el incremento que ha sufrido para este 2020 la tasa por vado», por lo que desde JxU entienden que, «en el caso de la reserva para aparcar en propio vado, se debería reducir en un 50% el pago previsto, pasando de 30 a 15 euros». Jiménez considera que, «si desde el gobierno se nos viene recordando constantemente la buena salud económica del Ayuntamiento, no tiene sentido que se pretenda recaudar más por algo que nos puede dar muchos dolores de cabeza, dado el déficit de aparcamientos que padece nuestra ciudad, en la que no solo no se han aumentado las plazas en los últimos años, sino que cada vez se han ido reduciendo más».
Por todo ello, en las alegaciones presentadas se ha pedido al gobierno la eliminación del pago del contravado, que el Ayuntamiento proceda a pintar en amarillo los bordillos de las aceras que se destinen a contravado para garantizar el acceso a los garajes, y establecer en 15 euros el precio de la tarjeta para aparcar en el vado del titular.
Más vale que de una puñeteras vez pudiesen un pediatra de guardia en el chare, ya esta bien de viajes a Sevilla