
La Feria de Consolación del próximo año pasará a la historia de esta arraigada fiesta de Utrera. La de 2020 será la edición en que se estrene el recinto ferial que quedará tras la profunda reurbanización que va a experimentar esa zona de la ciudad.
Está previsto que en febrero comiencen los trabajos y que se prolonguen durante cuatro meses. De esta forma, cuando llegue el mes de septiembre, los utreranos y visitantes podrán recorrer un espacio con importantes novedades. Lo único que faltará para esa fecha serán los casi 400 nuevos árboles que está previsto situar en ese enclave, ya que el período de plantación debe ser entre otoño e invierno, por razones técnicas.
La inversión total de este proyecto es de 1.313.000 euros, que serán sufragados por tres administraciones públicas: la Diputación provincial de Sevilla aportará 545.000 euros a través del Plan Supera, el Consorcio de Aguas del Huesna participará con 255.000 euros y el Ayuntamiento de Utrera pondrá los 513.000 euros restantes.
Una de las principales señas de identidad del reformado recinto ferial será la gran presencia de vegetación. Está previsto plantar 394 árboles, fundamentalmente almeces y fresnos, aunque también habrá otras especies más ornamentales en torno a las glorietas. De los actuales eucaliptos que existen en el recinto, 96 se mantienen –fundamente los que están en la zona más antigua de la feria-, mientras que otros 97 se eliminan al no presentar unas condiciones adecuadas y se sustituyen por 193 árboles.
Por otro lado, la actual caseta municipal desaparece con el objetivo de centrarla en el conjunto del recinto ferial y modernizarla, dotándola de servicios para convertirla en un edificio público de usos múltiples. Se accederá a ella por una glorieta adoquinada y tendrá un espacio ajardinado en todo su perímetro con una pérgola de glicinias, que es una planta trepadora.
También desaparece la caseta de obra, que se dedica a cuestiones de seguridad ciudadana, con el objetivo de crear en ese espacio una nueva manzana de casetas de socios y, al mismo tiempo, permitirá abrir dos nuevas puertas al parque de Consolación, para que ambos espacios queden más integrados. En este caso, dicha caseta se situará en una parcela municipal que se encuentra junto a la barriada Naranjal de Castillo, al lado de las actuales casetas de juventud.
Las zonas que no estarán afectadas por la reurbanización de la feria son las calles Bulería y Soleá, y las aceras par de las calles Toná y Fandango. Así, con la nueva configuración del recinto se modifica por completo todo el espacio que se fue creando con las ampliaciones de las últimas décadas, y ahora nacen tres manzanas de casetas, con calles en paralelo a la calle Bulería.
En cualquier caso, se ha procurado que los cambios para los caseteros sean los mínimos e imprescindibles. Se van a mantener los nombres de las actuales calles -y se van a crear otras nuevas-, también las casetas seguirán teniendo su mismo vecindario y localización dentro de las calles, salvo algunos casos particulares que sí traerán consigo la alteración de sus ubicaciones. Las casetas de juventud se reubicarán en la manzana más alejada del real, siendo frontera entre éste y la zona de chiringuitos y parque de atracciones. En cuanto a los procedimientos de solicitud, montaje y desarrollo de la feria 2020 no sufrirán ningún tipo de cambio, realizándose en los plazos y fechas habituales.
La pavimentación que se va a realizar corresponde a los acerados perimetrales del recinto, que servirán de límites entre el ferial y las barriadas que lo rodean. A ello se suman las manzanas que limitan con el estadio San Juan Bosco y con el instituto Virgen de Consolación, para que puedan funcionar como aparcamiento durante el resto del año. El resto seguirá siendo de albero, habiéndose estudiado la forma para contenerlo en su interior y que en las épocas de lluvia no se desplace. También se mantendrá el carril bici que actualmente discurre por esa zona de la ciudad.
Por otro lado, la principal intervención que se va a realizar es la que atañe a las infraestructuras básicas: colocación de alumbrado público, un nuevo centro de transformación eléctrica, instalación de tomas de agua y arquetas de saneamiento fijas, creación de un sistema de riego para el arbolado, y eliminación del tendido aéreo que será soterrado. A ello se sumará la instalación de mobiliario urbano, diseñado a partir de las nuevas papeleras que se han distribuido por toda la ciudad.
Con este proyecto no sólo se reurbanizará el recinto ferial y se le dotará de las infraestructuras necesarias, sino que permitirá habilitarlo como un espacio de uso y disfrute de los ciudadanos durante todo el año, integrándose como un recurso más de las barriadas adyacentes. Durante la presentación oficial de dicho proyecto ante caseteros, vecinos de la zona afectada y clubes que desarrollan su actividad en dicho entorno, el alcalde de Utrera, José María Villalobos, puso de manifiesto que «toda la parte de la feria que no se ve, las tripas del recinto, se encuentran en muy mal estado y era necesario actuar. Además, era una pena que esas siete hectáreas sean tan poco utilizadas a lo largo del año». Así las cosas, la intención con la que se ha planteado esa intervención es «resolver los problemas que existen en torno a las instalaciones del real, para poder desarrollar la feria con normalidad; y cerrar esa especie de brecha que queda durante el resto del año».
Así, se ha realizado un intenso estudio previo, que ha contado con la opinión de los técnicos de varias concejalías, de las empresas suministradoras, miembros de entidades e instituciones implicadas de alguna manera en la feria,… y también de técnicos de los Ayuntamientos de Sevilla y de Jerez de la Frontera, con los que se han analizado los problemas compartidos de otros recintos feriales. El proyecto tiene la firma de la unión temporal de empresas integrada por el estudio de arquitectura de Vicente Manuel Morales Garoffolo y el estudio DLV91 Ingenieros Consultores.
Pues nada, tendré que poner denuncias todos los días. Si es en la feria anteriores y el medidor de decibelios marca entre 10-15 dc más de los permitido por ley tanto de día como de noche en la calle utrerana perdiz. Ahora que estoy embarazada y mi madre viviendo conmigo, no me queara más remedio que la ley me ampare, porque desde luego el ayuntamiento y no lo hace.