
El año 2007 será recordado siempre en Utrera como uno de los más importantes de la historia de la localidad. Coincidiendo con el quinto centenario de la llegada de la Virgen de Consolación a la ciudad, se sucedieron un sinfín de actos de todo tipo que marcaron un hito en la destacada devoción a la patrona utrerana.
Para que el recuerdo de aquella efeméride quede para la posterioridad, la Fundación Caja Rural de Utrera ha editado un libro en el que se hace un repaso por los principales acontecimientos que se vivieron en aquellos meses. Con textos de Eduardo González de la Peña y fotografías de Pepe Florido y José Antonio Fernández Bernabé, este trabajo recoge crónicas y galerías en las que se señalan las jornadas más importantes de 2007.
El proyecto, que también sirve de homenaje a Salvador de Quinta Garrobo, uno de los principales artífices de aquella conmemoración, en la que trabajó como comisario, recuerda cómo se fraguó aquel acontecimiento, repasa las conferencias y eventos que se sucedieron durante los años previos y hace paradas en los actos que marcaron el recordado quinto centenario.
Bajo el título «Consolación y Utrera, las jornadas más importantes del V Centenario de la llegada de la imagen a la ciudad», aborda la apertura del año jubilar que la Santa Sede concedió al santuario de Consolación, recuerda la visita del rey Felipe –por aquel entonces, príncipe de Asturias-, hace referencia a la celebración del Santo Entierro Grande, habla de las jornadas dedicadas a la Armada Española y al Ejército del Aire, recorre las calles y plazas de Utrera con la histórica novena itinerante de la Virgen por los barrios, y comenta las jornadas taurinas que se vivieron en la ciudad. A ello se suman referencias al pontifical en la plaza del Altozano, a los espectáculos pirotécnicos, a los conciertos, a las luminarias y ministriles en Santa María,… así como a la edición de un disco y un libro, al pregón del V Centenario, a la salida extraordinaria de la patrona, a las innumerables peregrinaciones,…
A lo largo de un centenar de páginas, el lector puede encontrar numerosas fotografías y textos que recuerdan cómo se vivió aquel histórico año. Con este proyecto, la Fundación Caja Rural de Utrera ha querido mostrar una vez más su apoyo a cuantas cuestiones tienen que ver con la localidad. El libro ha sido repartido entre los socios de la entidad financiera utrerana.