
La Guardia Civil ha detenido a un hombre, de 41 años, como presunto autor de siete robos en cajeros automáticos, para los que empleaba explosivos caseros. Entre los afectados se encuentran uno en Utrera y otro en El Palmar de Troya.
Agentes del equipo de policía judicial de la Benemérita de Osuna se ha encargado de la investigación, denominada «Operación Polbe». Fruto de las pesquisas encontraron al protagonista de dichos robos en la localidad sevillana de Paradas. En el momento de su detención, el supuesto autor, J.P.B., fue sorprendido con diferentes artefactos para provocar la explosión de su próximo objetivo, que no pudo consumar por la actuación de los agentes.
Fue necesaria la intervención del grupo de desactivación de Explosivos de la Guardia Civil de Sevilla y de especialistas del grupo Cinológico, con el uso de sus perros especializados en la detección de explosivos.
Los agentes descubrieron que el detenido empleaba sustancias explosivas e incendiarias de fabricación casera. Aunque utilizaba productos de fácil acceso y aparentemente poco peligrosos, tras su manipulación llegaban a alcanzar gran potencia, y aumentaba el peligro por la alta inestabilidad de los componentes. El ahora detenido supuestamente provocaba explosiones con estas sustancias y ha causado graves daños en las entidades bancarias que intentaba robar, por cuanto inutilizaba por completo los cajeros automáticos.
Los hechos se remontan a principios de año, cuando comenzaron a producirse en distintas localidades de la provincia explosiones e incendios en cajeros de entidades bancarias. El ladrón actuaba con independencia de que se trataran de cajeros interiores o exteriores y de su situación. Llegó a realizar sus actuaciones en horario diurno y en calles peatonales con el consiguiente peligro para las personas que transitaban por el lugar.
El detenido ha sido puesto a disposición de la autoridad judicial después de que hubiera sembrado inquietud en diferentes localidades de la provincia sevillana (Utrera, El Palmar de Troya, Estepa, Arahal, Écija y La Lantejuela) y en la provincia onubense (Bonares).
Lo que no entiendo es que el juez lo deje libre con cargos