
La hermandad del Rocío de Utrera lo tiene todo preparado para iniciar su camino hacia la aldea almonteña. Este martes 30, la carreta con el simpecado dejará atrás la parroquia de San José, para emprender la peregrinación anual hasta el santuario que preside la Blanca Paloma.
Unas 300 personas son las que este año formarán la comitiva rociera utrerana, en la que habrá más de 20 carriolas y medio centenar de caballos. La salida de la hermandad se producirá al término de la misa de romeros que tendrá lugar a las 8.00 horas. Una vez el simpecado sea entronizado en la carreta, los romeros realizarán el recorrido tradicional por las calles de Utrera, con paradas en el ayuntamiento, en la iglesia de San Francisco y en la capilla de Fátima. Será en su caminar por la avenida María Auxiliadora, Sevilla, Álvarez Quintero, plaza de Gibaxa, Clemente de la Cuadra, plaza del Altozano, plaza de la Constitución, La Fuente Vieja, plaza de Santa Ana, La Corredera, plaza de la Trianilla, avenida General Giráldez y avenida Alcalde José Dorado Alé. Tras una jornada de visitas por las haciendas cercanas a la localidad, el cierre de la jornada llegará en el parque periurbano de La Corchuela.
El resto del camino traerá consigo momentos especiales con el paso en barcaza por el Guadalquivir en Coria del Río, los pinares de Aznalcázar, el vado del Quema, Villamanrique de la Condesa, la Raya Real y el puente del Ajolí. Ya en la aldea, los utreranos participarán en los actos organizados por la hermandad matriz, como la presentación ante la ermita (el sábado 3, sobre las 19.30 horas), el rosario de las hermandades (el domingo 4 por la noche) y el saludo a la Virgen del Rocío en la procesión (en la mañana del 5 de junio).
Cuando la hermandad haya vuelto a pisar los caminos de regreso a Utrera, la llegada a la ciudad será el jueves, 8 de junio. Sobre las 20.00 horas pisará el asfalto de la localidad, para iniciar el recorrido por las calles del municipio, con paradas en la iglesia de San Francisco, en la iglesia del Carmen, en la capilla de San Bartolomé, y en el cruce de la calle Álvarez Hazañas con San Juan Bosco.