
A pesar del férreo secretismo que suele rodear a la secta de El Palmar de Troya, se van conociendo algunos datos sobre el cambio de ciclo que estos días experimenta la llamada Orden de los Carmelitas de la Santa Faz. Tras la noticia sobre la dimisión del último «papa», publicada en primicia por Utrera Digital, han trascendido algunos detalles del que ya ejerce como su sucesor.
Bajo el nombre de «Pedro III» se presenta el nuevo líder de la «iglesia palmariana». En realidad, se trata de un suizo llamado Joseph Odermatt que, como obispo de ese colectivo, se hacía llamar Eliseo María. Lo ha explicado el profesor Magnus Lundberg, de la Universidad de Uppsala en Suecia, un gran conocedor de la realidad palmariana, quien comenta que ese hombre ejercía como secretario de estado durante esta última etapa, y que el ya dimitido Gregorio XVIII lo designó como sucesor en 2011, el mismo año en el que éste tomó posesión de su cargo.
Apenas un día ha estado esta secta sin líder. Fue el viernes 22 cuando el anterior «papa» renunciaba y abandonaba el recinto, dejando solamente una carta de despedida a sus fieles en la que afirmaba haber «perdido la fe». Tras esta noticia, el sábado era proclamado el nuevo «papa» del colectivo palmariano.
Según comenta Lundberg, es probable que «Pedro III» continúe «la relajación de las normas que Gregorio XVIII inició durante la última etapa de su papado». Y es que, en enero de este mismo año, el dimitido líder publicó una encíclica en la que hacía referencia al levantamiento de algunas de las reglas de esta secta. En concreto, se refería a las «enseñanzas morales» de la «iglesia palmariana», especialmente «en lo que se refiere a la vestimenta y, en cierta medida, la forma de interactuar con los no palmarianos», según recoge el profesor sueco. Sin embargo, se mantiene «la prohibición de los contactos con los ‘apóstatas’, es decir, que los palmarianos no deben, de ninguna manera, tener contacto con los miembros de la familia ex palmariana».
Como este lunes desvelaba Utrera Digital, Ginés Jesús Hernández –autoproclamado «Gregorio XVIII»- desapareció el viernes sin despedirse de sus fieles argumentando en una carta que había «perdido la fe». Sin embargo, otras informaciones apuntan a que este hombre se habría marchado con una mujer a vivir a Monachil (Granada).
Los miembros de dicha entidad están ahora investigando la situación financiera en la que este murciano, conocido como el «padre Sergio María», ha dejado las arcas de la orden.