La comunidad parroquial de San José ya tiene nuevo pastor. Florencio Gullón tomó este lunes posesión de su cargo al frente de la feligresía de mayor envergadura de Utrera, en una celebración religiosa que contó con la presencia de numerosas personas.
El vicario episcopal de la zona este, Diego Pérez, fue el encargado de presidir la eucaristía en la que también participaron otros presbíteros, e incluso contó con la presencia del vicario de la zona oeste, de la que procede Gullón. Y es que, durante los últimos años, este sacerdote ha ejercicio su ministerio en la parroquia Santa María de las Nieves de Benacazón, localidad desde la que llegó un nutrido grupo de personas para acompañarle. También estuvieron presentes representantes de los grupos y hermandades de la parroquia de San José, el presidente del Consejo Local de Hermandades y Cofradías, y el primer teniente de alcalde, Francisco Campanario (PSOE), entre otros.
En el transcurso de la misa, se dio lectura al acta de su nombramiento y realizó el juramento de fidelidad. También hizo pública protestación de fe y renovó las promesas de su ordenación sacerdotal. De igual modo, tomó posesión de la sede, del sagrario, del confesionario y de la pila bautismal. Además, recibió los Evangelios y las llaves del sagrario.
En su primera intervención como responsable de San José, quiso pedir «paciencia y tiempo» a sus feligreses, ya que «tengo que conocer a la parroquia y tenemos que conocernos todos». Prometió trabajar, aunque reconoció que «donde ha habido siempre dos pastores y ahora solo uno, yo podré llegar hasta donde mis límites y mis fuerzas alcancen».
También tuvo palabras para la Virgen de Consolación, de la que dijo que es «una advocación a la que tengo que conocer». De igual modo, comentó que él es antiguo alumno salesiano, recordó a María Auxiliadora y a San Juan Bosco, y deseó encontrarse «con esa fuente de espiritualidad salesiana tan importante que existe en esta ciudad».
